domingo, 26 de junio de 2011

Y si paran las rotativas?

Dónde quedaron los silencios. Por donde están los totalmente solos de los tangos ¡yo sé yo lo sé! quedaron... en el tenebroso pasado y...sí...Lo descubrí hace poco (por no decir ayer que queda muy reciente) cuando quise meditar...y bueno me agarra cuando me doy cuenta cuando estoy sintonizando el prorama de Larrea(Rapidísimo) y cuando el corazón se me escapa por los dedos de los pies o cuando lloro porque sí y como ahora no tengo excusas como la de la mestruación por ejemplo , me doy inmediata cuenta que lo mío es un simple y conocido transtorno de ansiedad...volviendo cuando estoy así medito, respiro profundo me pongo una musiquita de cuencos tibetanos en fin...lo que se hace en estoy casos.¿Ya está? no porque haciendome la experta en RRPP NO PARAN DE SONAR TIMBRES ANQUE TANGOS O CUMBIAS DE RINGTONES COLOCADOS GRACIOSAMENTE POR MÍ Y QUE SON LOS QUE ME DESVELAN, ME TALADRAN LOS SESOS Y DE ÚLTIMA NO ME DAJAN ESTAR SOLA CON MI SOLEDAD PARA saber por donde empiezo o rajo o lo que sea...no...no me dejan. Lo más peculiar es que no me animo a desconectarme porque como buena transtornada no sea cosa que "Algo" pase en ese segundo que se me ocurrió apagar los llamados. Lo lindo es que tengo razón, siempre algo pasa ¿y? ¿qué hacemos con eso?. Puedo salir corriendo a Chile a tapar el ahujero del volcán?, no puedo, ¿evitar que la bronquiolitis enferme niños?...no o resolver en una encuesta¿ quién esta viendo qué a las 22 hs?...no...y no ...no puedo Todo bien pero aún así me apuro para entre timbre y timbre mandarme un viaje mental al arroyo que me cuenta siempre en su orilla, ¡ése de Río Ceballos! La solución está al alcance de la mano pero andá a agarrarla! acá comienza la parte oculta, hasta el final de la nota.

martes, 8 de marzo de 2011

No sé que es lo que pasó: la niña me miró fijamente a los ojos como pidiendome explicaciones. No supe de qué explicaciones se trataba, hasta que me suspiró en forma reiterada, un solo suspiro me bastó para darme cuenta que sólo Ella me entendía.
Ni yo misma sabía "lo qué" lo cierto es que fue como un fulgor, un resplandor espectacular, un sismo de sentimientos movilizantes, un aliento mentalizado , un jugo de manzanares rojizos , un qué sé yo obnubilado. Y solo eso me bastó para saber que en este universo está todo bien. Más que bien...precisamente bien .Por eso, solo `por eso descubro que la vida es aunque sorpendente: ¡maravillosa! ¿o no? ¿qué nO?

jueves, 27 de enero de 2011

Noche de Reyes

Nos parábamos en la puerta (contaba mi Viejo) desde ahí mi tío Juan nos señalaba con su dedo regordete hacia la esquina derecha (otros años eran hacia la izquierda) y justo justo pasaba ese camión y era para nosotros la alegría más grande verlo.
En esos días casi siempre el 5 de enero Juan José (mi Viejo) ya había hecho su recorrida por los patios vecinos y a modo de visita garroneaba un rico café con leche o un apetitoso sanguche de salame y queso, lo que fuera servía para festejar la llegada de los famosos "reyes".
Y con la panza calentita aún escuchaba los argumentos del Tío
-Miren, miren vean ,ahí va, Ahí llega...¿ven? es el camión de los juguetes!!!
¡Esperen, esperen un poco que entre que entregue en uno u otro lado tarda...tarda.....
Pasaba el 5 y el 6 de enero con esa cantinela...: tarda pero en cualquier momento llega!
...20 años después esto me contó. Supe del dolor de un niño en esos ojos verdes que aún esperaban que se cumpliera lo que el Tío Juan les decía:
-¡Ahí viene, ahí llega el camión con los juguetes para ustedes!! hay que esperar, solo esperar...esperar...

domingo, 16 de enero de 2011

A veces me agarran...

Un día desperté y es sabido que abrí los ojos. Lo que no imaginaba es que al abrirlos me iba a encontrar en ese lugar.
Quise creer que estaba en el paraíso o en un sitio cercano a el. Quise emitir algun sonido y me fue imposible. La gente me miraba, la gente, mucha gente
¡que raro fue eso!
De pronto una mano se apoyó en mi cabeza y creí caer en un muy profundo pozo.
Es más estoy segura que caí en uno.
En un abrir y cerrar de ojos llegué al fondo. Sin gente, nada de gente.
¡que raro era eso!
La próxima vez cuando me despierte andaré con los ojos cerrados y listo!
 menos complicaciones!¿no?