
Veintiocho años viendo a través de sus ojos, los ojos de mi padre, veintiocho años compartiendo sus sueños y sus "ganas de jugar no de pelear".
No puedo pensar la vida sin su mirada, me hieren sus lágrimas cada vez que caen sobre sus mejillas rosadas...
Deseo para ella la mejor vida que las ausencias no la lastimen tanto y que sepa disfrutar de las presencias, de los amores firmes y de las manos que se arrepienten.
Deseo para Ella los colores y las risas porque desde que nació mi corazón late de otra forma con otro ritmo y por último
deseo que los rencores queden en el pasado y así pueda pacificar su presente
¡Feliz Cumple Señorita!