1973

Trataba de buscar la manera, había ido a Córdoba y antes de subir al micro de vuelta a casa, me detuve en la feria de libros y compré Crítica al programa de Gotha, ese año iba a ser crucial, venían las elecciones y la gente votaba a Perón, yo no votaba, de haberlo hecho nunca hubiese sido a Perón ni a nada que se le pareciera, me había quedado muy arraigada la idea de quienes están de qué lado y quienens están del otro, y mi lado no era ni iba a ser nunca con un militar. Era chica, rencién en diciembre había cumplido los 17, volvía a Baires con un nuevo proyecto: el de trabajar y estudiar de noche. Venía con el sabor amargo de haberme enterado por boca de mi Padrino que mis Abuelos no murieron en un accidente de trenes, sino que habían repartido a sus hijos en diferentes lugares, por falta de medios...cuando me lo dijo fuí muy dura con Él, pobre tío Negro, insulté a su Madre cuando en realidad no sabía a quien insultar, me sentía defraudada sobre todo con mi Vieja, pobre Vieja, por haberme ocultado lo que a ella tambiín le dolía y seguramente no supo cómo explicarme, lo más seguro es que ella tampoco lo supiera, o no lo hubiese perdonado...lo que sí sé es que volví a Baires con los ojos más abiertos que antes y habiendo resuelto encontrar el camino que hiciera cumplir mis ideales, en los que no hubiera Madres abandonadas, ni hijas defraudadas, donde no hubiera miseria, ni soledades. Todavía no sabía lo largo de ese camino, ni lo pedregoso que resultaría, pero eso lo iría aprendiendo, lo sigo aprendiendo y no me arrepiento.
Efectivamente llegué, empece a trabajar y a estudiar allí encontré mi lugar, en el aula visualicé a un morochito que gesticulaba grandilocuentemente sobre la lucha de clases, me acerqué y le dije:
¿vos militás en un partido?, sí repondió él , ¿puedo ir a una reunión con ustedes? y...no es para internos (?) por ahí cuando haya un acto te aviso...en ese momento pensé que debía ser todo un trámite acercarse a alguien que militaba y era socialista...algo interno...haciendola corta se ve que alguien le dijo que se me acercara urgentemente porque al día siguiente ya tenia en mis manos una invitación para una charla de Que hacemos despues del 11 de marzo o algo así, que también para hacerla corta fui sola con una amiguita de 13 años llamada Titina, pobre amiguita, nunca entendió que hacía conmigo ahí, y bueno...ese fue el comienzo, aquel hombre de gruesos bigotes decía, mejor que yo , claro lo mismo que yo pensaba, por lo tanto, nunca me despegué ni del hombre(Rafa) ni de sus ideas y obvio ni de mi Partido...aquí decidí ser militante.
Primera caída en cana
Sí niñitas! Mami cayó en cana , no una, sino tres veces
Ustedes dirán si se concentran que siendo el año 1974, estábamos en democracia, ¡já! ¡qué bueno!...el pequeño problemita es que la democracia de los gobiernos populares no es necesariamente la democracia de los trabajadores...a ver...
los gobiernos, pongámosle este del 74, hablaban de democracia pero si como yo o cualquier persona reclamaba por sus derechos, ¡zas! se acabó la "demo"
..."porqué no se dejan de joder chicos" ¿no tienen nada que hacer? voz del tipo del comando
...no hacíamos nada...voz de nosotros,(volanteábamos en la puerta de un colegio pidiendo que su directora acepte el centro de estudiantes)
Escenario: comisaría numero 1 de San Martín
actores: Ariel; Diana y yo...por un lado
Comisario, sargentos, por el otro
escena movilizadora: golpes, quejas, llantos, ah! perdón el protagonista A que encima de tirar volantes cometió el error de ser judío.
Toda una situación provocada para que no nos quedara la menor duda que la democracia que nosotros queríamos, acá no la íbamos a obtener
Despues de 8 horas, fotos mediante y sermón de cuidado con los zurditos, volvimos a casa...
bueno ya iba a empezar a despedirme de mi casa materna, pero esa es la historia que viene despues de la segunda caída...